Cada vez es más común y necesario que las empresas avancen en la digitalización empresarial, y con ello, un mayor esfuerzo para obtener un control financiero de todas las operaciones que se realizan a tiempo real.
Para poder realizar estas operaciones es imprescindible invertir en tecnología, y de este modo garantizar la capacidad de integración de analítica financiera y datos de cualquier operación o proceso que se realiza para la optimización de la gestión de la empresa.
Entremos en materia. Cuando hablamos de Analítica Financiera o análisis financiero nos referimos al análisis que nos proporciona diferentes perspectivas basadas en los datos financieros de una compañía, las cuales nos aportan unos conocimientos que nos facilitan las cosas a la hora de tomar de decisiones y realizar estrategias que busquen mejorar el rendimiento de la empresa.
Podemos decir que es la forma que tenemos para convertir los datos en algo más práctico, una comprensión de estos mismos para una mejor toma de decisiones, con la ayuda de informes, visualizaciones, análisis predictivos, etc.
La analítica financiera afecta a todos los aspectos de una empresa, puesto que desempeña un papel imprescindible en el cálculo de los beneficios y la posibilidad de realizar previsiones en el ámbito empresarial. Para garantizar que los departamentos se basan en los datos, los directores financieros trabajan de la mano del departamento de IT. De este modo pueden aprovechar la analítica financiera de manera que se le saque el máximo partido a la integración y maximicen la automatización.
Entre las principales herramientas que posibilitan la respuesta a preguntas basándonos en la información real que se ha recaudado nace el término Business Intelligence. Podríamos definir este término, también conocida por las siglas BI, como la habilidad para transformar los datos en información y esta información en conocimiento, consiguiendo así optimizar el proceso de toma de decisiones de los negocios.
Es imprescindible para la industria de las finanzas, debido a que las herramientas de inteligencia empresarial y la analítica son instrumentos que ayudan a ver la realidad con información y datos de forma más clara y concisa.
Una solución de Business Intelligence bien aplicada nos permite que el manejo de los datos a tiempo real sea rápido y directo teniendo en cuenta las dimensiones de la empresa, lo cual nos da facilidades también a la hora de seguir elaborando estrategias.
Es importante modernizar los negocios digitales para así asegurarnos de que todos los procesos son gestionados con mayor eficiencia y se pueden analizar para así mejorar de forma más rápida y efectiva. La capacidad que proporcionan las nuevas tecnologías para mejorar los procesos de datos, y las distintas herramientas que se utilizan para acelerar los negocios con Inteligencia Artificial, cobran mucho valor al facilitar las capacidades de proporcionar una automatización más rápida y una optimización de costes.
En la actualidad, los Sistemas Financieros Avanzados se dedican a reforzar y actúan en el dinamismo de las empresas para el flujo de inversiones inteligentes que son capaces de empoderar a toda la cadena de valor de las empresas. Las finanzas que son integradas en las operaciones con la analítica de procesos y beneficios contrastados, tienen la capacidad de determinar qué procesos deberán de ser modificados para mejorar la rentabilidad del negocio.
Gracias a la digitalización de las empresas podemos tener una gestión mucho mejor de los datos y más eficiente, viéndonos sumergidos en la mejora de las fuerzas de trabajo como palanca transversal para mejorar la productividad y colaboración. De este modo podemos integrar una mayor conectividad y flexibilidad de los datos para mejorar en la innovación, que al final se traduce en mejoras económicas sobre los costes y rentabilidad alcanzada.
En muchas empresas aún hay procesos obsoletos de digitalización que hay que mejorar, o incluso implementarlos desde 0, por eso es importante invertir en ello. De este modo podremos adaptarnos a los mercados sin poner en riesgo la inversión ni la rentabilidad, siendo los datos y la analítica nuestros grandes aliados.